Celaya, Gto; Al reconocer las constantes quejas de comerciantes establecidos en el andador Góngora por la presencia de vendedores ambulantes con carpas que bloquean la visibilidad de sus negocios, el presidente municipal Juan Miguel Ramírez Sánchez informó que, por ahora, es imposible retirarlos de forma definitiva y que el proceso de ordenamiento será paulatino.
El edil explicó que buena parte de este comercio antes se instalaba en el Parque Morelos, pero debido a problemas con el estacionamiento y sus posibles daños estructurales, los vendedores han migrado al centro. “Ellos históricamente vendían ahí y tienen necesidades”, dijo.
Ramírez Sánchez detalló que existe un proyecto para crear un nuevo espacio ordenado y digno para este tipo de comercio en el predio de la escuela Tresguerras. Dijo que idea a largo plazo es construir un “parian” o parque comercial con infraestructura adecuada. Sin embargo, admitió que el proyecto requerirá una inversión de varias decenas de millones de pesos y se encuentra apenas en etapa de evaluación.
Mientras tanto, señaló que el gobierno municipal ha optado por dar permisos limitados para evitar desalojos abruptos. “Antes era más seguido (el comercio en Góngora), hoy son más espaciados”, aseguró. Reconoció también que existe inconformidad legítima de los comerciantes establecidos por la obstrucción de sus locales y que se han sostenido diálogos con los ambulantes para reducir el impacto.
Además del tema de las carpas, el presidente municipal admitió que hay problemas con el ruido excesivo por músicos y vendedores con bocinas. Anticipó que se aplicará el mismo protocolo de regulación que se usa con bares y restaurantes, medición de decibeles, apercibimientos y, en caso de reincidencia, sanciones más severas.
Otro tema que preocupa a las autoridades es la opacidad en el cobro de espacios por parte de líderes de comerciantes. Ramírez Sánchez explicó que existen “organizadores” que venden los lugares a precios altos sin control oficial. Por ello, el gobierno busca fomentar la formación de cooperativas de vendedores para transparentar la asignación de espacios.
El alcalde también reconoció que parte del comercio ambulante no es originario de Celaya. “Ni los productos son de Celaya ni las artesanías son de Celaya”, comentó, y afirmó que ya se instruyó a fiscalización para verificar el origen de los vendedores y dar prioridad a los locales.
Finalmente, subrayó que el Ayuntamiento seguirá permitiendo la instalación de ambulantes en el andador Góngora, aunque con controles más estrictos y en menor número, hasta que exista una solución definitiva. “Es un proceso. No queremos quitar a nadie de forma abrupta. Vamos bien, pero nos falta mucho por regularizar”, concluyó.